Despues de las lluvias, el valle esta floreciendo. Dentro de poco, las uvas van a aparecer. Con agua del cielo, el valle produce mucha fruta-es muy fertil. Y nosotros?

En la Cuaresma y Pascua, Jesus nos concede una lluvia de gracia celestial. San Pablo recibio una lluvia de luz y gracia. A pesar de la persecucion, el se convertio en un gran Misionero. Hermana Carmen dedico su vida al Senor y a dando mucho fruto en nuestro valle y otros lugares-a pesar de su enfermedad.

La Palabra de Dios dice que tengamos de producir frutos buenos-no solamente con palabras pero con acciones tambien. Se ve la Luz de Jesus en mis palabras con mi esposo/a o mi familia? Se ve el amor de Dios en mis acciones en el trabajo, escuela, o en el camino?

Que seamos tan productivos para El Senor y nuestro projimo/a como las vinas son productivos para nuestro valle.

Padre Miguel Ronayne